miércoles, 26 de febrero de 2014

7. Los Rayos Gamma: la más intensa energía

La radiación gamma o rayos gamma (γ) es un tipo de radiación electromagnética, y por tanto constituida por fotones, producida generalmente por elementos radiactivos o por procesos subatómicos como la aniquilación de un par positrón-electrón. También se genera en fenómenos astrofísicos de gran violencia.

La energía de esta naturaleza se mide en megaelectronvoltios (MeV). Un MeV corresponde a fotones Gamma de longitudes de onda inferiores a 10-11 m o a frecuencias superiores a 1019 Hz.
Los rayos gamma se diferencian de los rayos X en su origen: a) Son rayos cósmicos expelidos por explosiones de supernovas o núcleos de galaxias activas.
En general, los rayos gamma producidos en el espacio no llegan a la superficie terrestre, pues los absorbe la alta atmósfera.Excepcionales son los Rayos Gamma de Energía Superior a unos gigaelectronvoltios (GeV, miles de MeV) que al incidir en la atmósfera producen miles de partículas (cascada atmosférica extensa), lo cuales, como viajan a velocidades cercanas a la luz a pesar de la resistencia del aire, generan  un fenómeno lumínico azulado, característico de los reactores nucleares. Estos rayos cósmicos tan veloces electrifican las partículas del aire.


Incidencia de los Rayos Gammas sobre el Sistema Nervioso.

Esta Super Energía activa a su vez a todas las glándulas.
Se dice que bajo los efectos de los rayos Gamma nos encontramos como en casa, ya que a partir de esa energía suprema partió nuestro viaje hacia la vida. Aquí vivimos y nos experimentamos a nosotros en el UNO. Nuestro campo energético personal está fundido con el Campo Energético Universal.
Todo cuanto captamos, primero intelectualmente y después intuitivamente, adquiere ahora una comprensión completa. El conocimiento que obtenemos a través de los rayos Gamma va más allá aún del que nos proporciona el tercer ojo, puesto que ya no estamos separados del objeto de la percepción. Vivimos las diferentes manifestaciones de la creación, entre las que también se encuentra nuestro cuerpo, como un juego de la Inteligencia Universal, con la que nos hemos unificado.
Los rayos Gamma provocan la activación de la glándula pineal, se disuelven también los últimos bloqueos limitadores inferiores y las energías comienzan a vibrar con las frecuencias más altas de que son capaces.

Tan pronto como la glándula pineal está completamente despierta, su misión, recibir las energías cósmicas, ha concluido. Ahora somos nosotros los que emitimos energías...
Cuando la glándula pineal comienza a abrirse, vivirás instantes cada vez más frecuentes en los que la separación entre tu ser interior y la vida exterior se anula. Tu conciencia está completamente en calma y distendida, y en esa calma vives tu auténtica esencia como el ser puro omnipresente, en el que existen todas las cosas.
A medida que la glándula pineal se va desplegando es más frecuente la aparición de estos momentos, y cada vez se experimentan con más claridad, hasta que se convierten en una realidad permanente. Cuando tu ser esté maduro para ello, esta iluminación definitiva puede aparecer súbitamente, y no existe camino de regreso en tu evolución. Tienes la sensación de haber despertado de un largo sueño y de estar viviendo la realidad sólo ahora. En tu camino hasta allí te has convertido en un recipiente vacío, en cuyo receptáculo vacío se ha vertido la luz y la energía hasta ocupar su último rincón. Ahora sabes que esto es tu auténtica esencia, la única realidad permanente. Tu «yo» individual se ha convertido en el «yo» universal: En tu actuación realizas la intención de la Primera Fuente, e irradias una energía que abre el corazón de todos los seres sensibles. Si ahora quieres saber algo, no necesitas más que dirigir tu atención a ello, puesto que todo existe en la Inteligencia y la Razón con la que te has hecho uno. Así, la creación es un juego que se consuma en la infinitud de tu propia conciencia.
Conoces que incluso la materia sólida no es otra cosa que una forma mental en la conciencia suprema, y que como tal no existe en el sentido auténtico. Todo lo que has considerado real se convierte en una ilusión. Vives el vacío máximo: pero este vacío es idéntico a la plenitud máxima, puesto que es vida en su esencia pura. Y esta esencia divina de la vida es pura felicidad.

Los rayos gamma hacen posible alcanzar una profundidad de conocimiento y una sensación de totalidad que hasta entonces no te parecía posible. Las meditaciones y los sentimientos de entrega hacia lo Superior son intensos.

En este contexto, consideramos también interesante el hecho de que las fontanelas de un bebé permanecen abiertas desde los primeros 9 a 24 meses de vida. En la primera época de su existencia terrenal, lo niños continúan viviendo en la conciencia de una unidad indivisa.


Los brotes de rayos gamma son los eventos electromagnéticos más luminosos del universo. Están asociados a grandes explosiones en galaxias muy lejanas y se ha comprobado que un estallido típico es muy corto, de unos pocos segundos, y puede generar la misma energía que el sol en un período de 10.000 millones de años.

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